Un material tan común y económico como el cemento adquiere una dimensión de elegancia, calidad y estética confortable al realizarle un servicio de mantenimiento con nivelado, pulido y abrillantado. Tal es el producto que ofrece un desbastado de concreto en pisos de este material que, con un servicio de bajo coste, logra lucir con gran distinción.
Desbaste y pulido de concreto
Como parte del mejor aprovechamiento de un piso de concreto es necesario realizar un desbaste. Ya sea porque esté dañado o porque es el acabado rústico tras instalarlo, su importancia radica en que con este proceso se reducen entre 3 y 5 milímetros de la capa visible. De esta forma se puede nivelar y alisar la superficie, limar porosidades o protuberancias, y eliminar manchas, así como marcas de grasa o humedad.
Una vez que el piso se nivela, carece de porosidad y está liso; ahí es cuando ya se puede pulir para lograr su abrillantado. Además, el desbaste permite rebajarlo hasta la aparición de la grava, lo que permite brindarle en el pulido, un diseño que imita al granito.
El proceso
Desbaste. Se realiza con máquina planetaria de bajo grado (grueso) que permite rebajar el material y sus defectos.
Pulido. Se da en una o varias sesiones con discos diamantados cada vez más finos que corrigen las marcas del proceso anterior, pulen y abrillantan.
Terminado. Se aplica un acabado de aspersión con litio, que brinda resistencia al concreto y abrillanta su superficie hasta un grado de reflexión tipo espejo.
Coloración
Para dar un acabado de otro tipo de textura o coloración, existen procesos de entintado del concreto. Uno de ellos consiste en aplicar pigmentos a la mezcla durante su vaciado, de tal forma que el color se aplica desde el inicio de su instalación.
Los colores para concreto son muy variables; entre los pigmentos se usan óxidos de hierro, cromo y cobalto para obtener tonos rojizos, amarillos o negros (y sus combinaciones) en el primer caso, verdes en el segundo y azulados en el tercero.
Oxidación
Otro procedimiento es el del concreto oxidado u oxicreto. Este proceso químico otorga al material, cambios definitivos. Se trata de una reacción entre iones metálicos y los componentes del cemento, que puede aplicarse en pisos nuevos o viejos. Aunque el oxidante es un líquido de color diferente al final, corrosivo y muy tóxico, tras aplicarse brinda una coloración permanente al concreto, lo protege de los rayos UV y es hipoalergénico.
Es un procedimiento que permite al cemento adoptar muchos terminados, texturas y coloraciones, imitando incluso, a piedras como alabastro o mármol. Tras la oxidación, se aplica un recubrimiento de un sellador polimérico mate o brillante de acuerdo con el acabado buscado. El proceso en general, además de ampliar las posibilidades de decoración del concreto, le brinda una gran resistencia.
Como se ve, el desbastado de concreto es un proceso que da apertura a una gran variedad de terminados posibles para este material, desde un pulido y abrillantado, hasta una nueva rigidez, colores distintos o aspecto similar a otros materiales. ¡Nada explota mejor las propiedades del también llamado hormigón!
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